Hace pocos meses hubo una exposición sobre Ibáñez, más que merecida, en el Círculo de Bellas Artes (Madrid). De ella, he rescatado la imagen de cabecera, muestra perfecta de su largo, magno hacer.
Coincidiendo con la señalada fecha del 23 de abril, localicé un letrero que, siendo mejorable en la forma, representa bien el espíritu de Ibáñez y la esencia de la lectura. Lo encontré en el blog del colegio público Pablo Sorozábal (Móstoles). Sea cual sea su origen, es bienintencionado.
La lectura perjudica la ignorancia, el dogmatismo, el uso de la fuerza, la acidez de estómago, el estrés, la depresión y las ganas de comprar en las muchas teletiendas que proliferan en las televisiones.
8 mayo, 2015 a las 12:27 am
Lindo comentario y lindo dibujo. La lectura perjudica a la guerra y al poder mal administrado.