El cierre de una librería siempre genera un sentimiento de pérdida. Es lo más cercano a la muerte de un amigo. Esperamos que alguien, él mismo, venga de no se sabe dónde a decirnos que no, que se lo ha pensado mejor y que aguantará unos añitos más.
Mi admirada Negra y Criminal anunció su final y lo dató: 3 de octubre de 2015. No quise creer tan luctuosa noticia. Escribí, compungido, a mi admirado Paco Camarasa. Hice un pedido de unos cuantos libros de su elección y me senté a aguardar que la decisión fuese reconsiderada.
Hoy, día 3, recibo un correo electrónico que lleva por asunto un escueto «Adiós» y el siguiente cuerpo.
4 de Diciembre de 2002
3 de Octubre del 2015
“Estaba hecha del material con el que se construyen los sueños”
GRACIAS y ADIÓS
Saludos negrocriminales y buena lectura
Salutacions negrocriminals i bona lectura
Goraintzi beltza-kriminalak eta irakurketa onak
Saúdos negrocriminais e boa lectura
Luchamos con denuedo por evitar que especies de nuestra naturaleza desaparezcan. Hablamos, con razón, de que el maltrato a nuestros semejantes, a los gorilas del Congo, las ballenas de Groenlandia, los elefantes de Namibia o el lince ibérico de Andalucía constituye la máxima expresión de nuestra decadencia como homo sapiens. Ponemos en duda que tal «homo» sea verdaderamente «sapiens» y emprendemos campañas de salvamento, no siempre eficaces, de seres en peligro de extinción.
Algún día nos percataremos de que la librería es una especie (acepciones 1 y 2 del diccionario de la RAE) que debe ser protegida. Por el bien del hombre, tan necesitado de la compañía de las personas como de la amistad de los libros. Compañía y amistad que siempre se encuentran en una buena librería.
4 octubre, 2015 a las 5:43 pm
Que pena! Con la crisis han cerrado cientos de librerias.